"No creo que seamos parientes muy cercanos, pero si usted es capaz de temblar de indignación cada vez que se comete una injusticia en el mundo, somos compañeros, que es más importante" -

Ernesto "Che" Guevara

sábado, 24 de septiembre de 2011

BOICOT AL KIOSCO LA SEMANA DEL 26-09

Para que el colegio no se venda en partes...




Desde que entramos al colegio, advertimos que hay varios kioscos y un buffette. Para comer ahí, tenemos que pagar 15 pesos, y nos vemos obligados a comprar solo en estos comercios durante nuestro turno. Además vemos como mientras pasa el año, Richard va aumentando el precio sin ningún criterio con el aval de las autoridades. En los últimos años, hemos avanzado en algunas conquistas, a partir de las quejas, protestas y propuestas presentadas, como ser que haya un microondas a disponibilidad para aquellos que quieran llevarse viandas desde las casas, o un dispenser de agua, o incluso menúes estudiantiles “económicos”. Como respuesta a la suba de los precios que tenemos que pagar día a día, este año surgió la iniciativa estudiantil de realizar un boicot a los kioscos, que fue una de la más efectivas y organizadas medidas del año de parte del CENBA.

Pero vale la pena pensar un poco más profundamente la cuestión: ¿qué significa que un colegio público le alquile a una empresa privada una parte del edificio para que ésta lucre con los bolsillos de quienes transitamos por él todos los días? Los kioscos y el buffette, son servicios prestados a concesión por una empresa privada que maneja el señor Richard (es decir, que ésta le paga un canon o alquiler al colegio). Entonces esto no es más que un negocio que se realiza entre Richard y las autoridades de turno. Esos precios que tenemos que pagar para poder almorzar, van a parar a los bolsillos de una concesión privada que está totalmente avalada y existe gracias a la renovación anual del contrato, por parte de las autoridades. Entonces... ¿es real la educación pública, con una empresa privada que lucra con nuestras pancitas, nuestras necesidades y antojos? Nuestra escuela pública ¿no debería ser garantizarnos la accesibilidad en todos los aspectos? También en lo que hace a nuestros materiales de estudio, también en lo que hace a nuestros viáticos, y también en lo que hace a nuestra alimentación que, sobre todo tratándose de un colegio que nos hace pasar a veces diez horas por día en él. Los kioskos no son accesibles para todos, y mucho menos podemos aceptarlo si esto se perpetúa a través de un negocio dentro de una escuela pública, que además hace que el colegio genere recursos propios, se autofinancie y de esta forma exija menos presupuesto educativo que debería provenir del Estado. Todo eso expresa a las claras varios problemas de fondo que hacen a nuestra educación día a día y que nosotros aceptamos sin darnos cuenta. Desde LC+DB nos cuestionamos esta realidad que vivimos nuevamente y te proponemos discutir y cuestionar estos temas para cambiarlos.


...mi educación, la hago yo


En principio, desde La Caravana + Desde Bolívar, queremos que éste empiece a ser un debate cotidiano, entre los y las estudiantes, que en nuestras aulas y en nuestros pasillos empecemos a dar esta discusión, a desnaturalizar la existencia de una concesión privada, y a problematizarlo pensando siempre que las cosas podrían ser distintas, que el cambio es posible y que nosotros podemos, poco a poco, generarlo. Que nos preguntemos si es acaso esto lo que la comunidad educativa del Nacional Buenos Aires quiere para sí misma. Y si no es así, a quiénes les interesa, a quiénes beneficia este negocio... ¿a los estudiantes, docentes y no docentes que transitamos todos los días por el colegio? Esta discusión también tiene que ver con la democratización, puesto que, como ya se ha dicho, la concesión privada se mantiene gracias a que las autoridades (impuestas por el Consejo Superior) le renuevan el contrato. No es algo propio de Zorzoli y Zbar, no lo fue de González Gass: pero cualquier rector que no responda a los intereses de la comunidad educativa, seguirá manteniendo estos kioscos que lucran con nuestra educación.

A principio de año surgió del cuerpo de delegados del turno noche la propuesta de organizar un boicot que tuvo un éxito rotundo. A mitad de año lanzamos una convocatoria abierta para realizar un kioscomóvil, organizado por y para los estudiantes. Pese a nuestros esfuerzos, vemos que hoy en día los precios no sólo están muy lejos de ser populares, sino que además continúan aumentando.

Vayamos de nuevo por un gran boicot, para demostrar que queremos un comedor estudiantil gestionado por el Colegio, cuyo objetivo no sea lucrar, sino hacer accesible a quienes formamos parte del colegio nuestras comidas, a precios populares (acordes a los de una escuela pública) y con menúes preparados pensando en nuestras necesidades.

Desde Bolívar + La Caravana
Lista 36

No hay comentarios:

Publicar un comentario